Ribadeando en Ribadeo y alrededores un fin de semana largo para descansar.Taramundi y sus navajas y cuchillos nos vieron llegar e irnos a la velocidad de un río con caudal. Así que visitamos el museo de MAZONOVO, que es este sitio que veis, la primera foto incluso nos mira asombrados con las ventanas-ojo y el canal del agua-boca y enseguida partimos para darle de comer al IkerMan (nuestros sobrino).
Después de la parada "gastronómica-lentejera" en la bonita CASA FANDÍN (muy cerquita de Ribadeo), nos acercamos a la playa de las Catedrales, que, en las cercanías del invierno, tiene este aspecto ensoñador y nebuloso.
En la siguiente foto, veis dos visiones de esta playa, hacia arriba y hacia abajo. El azul del mar y del cielo se tiñeron ese día en gris y arena, pero igualmente fué una excursión estupenda!!
Nosotros tan tranquilos por allí mientras los esquiadores se abrían paso en las pequeñas pistas de esquí gallegas...
